27 de Abril.- Televisa y el ciberespacio

Ahora resulta que el internet esta en manos del "crimen organizado y de perversos" y que "hay mucha basura", debiendo el gobierno "intervenir en la mismas redes sociales".
Se equivoca, mister Lopez-Doriga, lo que pasa es que la ciudadanía ya se ha informado mejor usando el ciberespacio, dejando de lado las voces de "opinión" que las televisoras antes nos endilgaban, rechazando el aborregamiento del que era presa por que ellos eran la única fuente de información para saber los acontecimientos del país.

Ya no mas: Twitter y Facebook ha venido abriendo espacios de información y comunicación de verdadera importancia social, donde las personas que son usuarios de estos, se han dado a la tarea dantesca de repartir y compartir la información que JAMAS se les dio, da y dará en los medios de televisión privadas, como TELEVISA y TVAZTECA.

Esto parece molestare incomodar a los “dueños de la palabra” de los espacios informativos, cuando ven que la ciudadanía comienza a tener un CRITERIO PROPIO respecto a los temas de actualidad. De esta manera el poderío informativo de las televisoras comienza a flaquear cuando su credibilidad se pone en duda.

Los ataques de los comunicadores en tercer grado, en su intento de SATANIZAR a las redes sociales y su desesperado intento de IMPONER una errada opinión en la ciudadanía nunca tuvo en cuenta la respuesta de las personas que defendieron la LIBERTAD DE EXPRESIÓN e INFORMACIÓN.

Miles de usuarios en twitter -como yo- se sintieron agredidos, más que a los errados argumentos de los periodistas de que las redes están en manos de “crimen organizado” que “son personas de mala fe” también que “la información que se genera en las redes es basura” fue el intento de hacer suponer que el gobierno debe intervenir en la red para controlar el flujo de “información basura”.

Por eso, si eres usuario de tuiter, metete al hashtag #apagontelevisa  que esta cobrando popularidad y es una muestra mas de que los ciudadanos en general cada vez estamos mas inconformes contra el dominio e hipocresía de estos monopolizadores de opinion